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sábado, 16 de junio de 2012

La Iglesia armó un debate sobre minería

El foro La Iglesia frente a los megaproyectos mineros reunió a 250 participantes. Llegaron de Azuay, Loja, El Oro y Zamora Chinchipe. La cita se inició a las 09:30 en el Vicariato de la Diócesis de Zamora. Julio Parrilla, obispo de la Diócesis de Loja, fue el primer expositor. Él dijo que la minería es un problema de política pública que involucra a los actores sociales, por eso “nosotros no podemos quedarnos callados”. Él se refirió a la necesidad de informar a la ciudadanía sobre los beneficios y los perjuicios de la minería a gran escala. Pero fue claro al decir que no están a favor ni en contra. “Lo que busca la Iglesia es un diálogo sincero”. Francisco Ochoa es coordinador de Cáritas en la zona sur. En su intervención, señaló que la Iglesia no puede estar exenta de lo que pasa con la naturaleza. Según él, no se debe dejar de considerar el bienestar que se puede obtener de la minería, pero hay que responsabilizarse de los problemas del futuro. Eduardo Calva, subsecretario de Minas de la Zona 7, también participó en este foro, que duró hasta la tarde. En su ponencia defendió los convenios mineros firmados y destacó el interés que tiene la Iglesia para informar sobre la explotación minera. En esa zona, por ejemplo, se encuentran los proyectos Fruta del Norte (explotación de oro) y Mirador (cobre). Pero Calva censuró las acusaciones de corrupción contra el Gobierno, que hizo el sacerdote del Coca, Txarli Azcona, quien intervino en este foro. Calva dijo que el Gobierno busca una minería justa con el Estado, la economía y el ambiente. Para el gobernador de Zamora Chinchipe, José Paqui, existe desinformación sobre los proyectos mineros que se desarrollan en la provincia. “Es importante que la Iglesia tome parte, sin embargo no hay que cerrarse al desarrollo que esta actividad permitirá al país”. José Calva, presidente de las Comunas de Loja, está de acuerdo con que la Iglesia se involucre en el debate de la extracción minera en el país, pero exhortó a las autoridades eclesiásticas a continuar “con esta propuesta de información verdadera de la explotación minera”.  Este contenido ha sido publicado originalmente por Diario EL COMERCIO en la siguiente dirección: http://www.elcomercio.com/pais/Iglesia-armo-debate-mineria_0_719328228.html.

La Iglesia armó un debate sobre minería Este contenido ha sido publicado originalmente por Diario EL COMERCIO en la siguiente dirección: http://www.elcomercio.com/pais/Iglesia-armo-debate-mineria_0_719328228.html. Si está pensando en hacer uso del mismo, por favor, cite la fuente y haga un enlace hacia la nota original de donde usted ha tomado este contenido. ElComercio.com

El foro La Iglesia frente a los megaproyectos mineros reunió a 250 participantes. Llegaron de Azuay, Loja, El Oro y Zamora Chinchipe.
 La cita se inició a las 09:30 en el Vicariato de la Diócesis de Zamora. Julio Parrilla, obispo de la Diócesis de Loja, fue el primer expositor. 
Él dijo que la minería es un problema de política pública que involucra a los actores sociales, por eso “nosotros no podemos quedarnos callados”.
 Él se refirió a la necesidad de informar a la ciudadanía sobre los beneficios y los perjuicios de la minería a gran escala. Pero fue claro al decir que no están a favor ni en contra. “Lo que busca la Iglesia es un diálogo sincero”. Francisco Ochoa es coordinador de Cáritas en la zona sur. En su intervención, señaló que la Iglesia no puede estar exenta de lo que pasa con la naturaleza. Según él, no se debe dejar de considerar el bienestar que se puede obtener de la minería, pero hay que responsabilizarse de los problemas del futuro. Eduardo Calva, subsecretario de Minas de la Zona 7, también participó en este foro, que duró hasta la tarde.
 En su ponencia defendió los convenios mineros firmados y destacó el interés que tiene la Iglesia para informar sobre la explotación minera. En esa zona, por ejemplo, se encuentran los proyectos Fruta del Norte (explotación de oro) y Mirador (cobre).
 Pero Calva censuró las acusaciones de corrupción contra el Gobierno, que hizo el sacerdote del Coca, Txarli Azcona, quien intervino en este foro.
 Calva dijo que el Gobierno busca una minería justa con el Estado, la economía y el ambiente. Para el gobernador de Zamora Chinchipe, José Paqui, existe desinformación sobre los proyectos mineros que se desarrollan en la provincia. 
“Es importante que la Iglesia tome parte, sin embargo no hay que cerrarse al desarrollo que esta actividad permitirá al país”. José Calva, presidente de las Comunas de Loja, está de acuerdo con que la Iglesia se involucre en el debate de la extracción minera en el país, pero exhortó a las autoridades eclesiásticas a continuar “con esta propuesta de información verdadera de la explotación minera”.  Este contenido ha sido publicado originalmente por Diario EL COMERCIO en la siguiente dirección: http://www.elcomercio.com/pais/Iglesia-armo-debate-mineria_0_719328228.html.

La Iglesia organizó foro sobre minería en Zamora Chinchipe

La Iglesia Católica de Ecuador se muestra preocupada por las posibles consecuencias sociales y ambientales de la minería, dijo a la agencia Efe Walter Heras, obispo de Zamora Chinchipe, donde el Gobierno firmó el primer proyecto de minería a gran escala.
En la capital de esta provincia ayer tuvo lugar el foro “La Iglesia frente a los megaproyectos mineros”, organizado por la Pastoral Social de la zona sur del país, donde participan representantes eclesiásticos de Azuay, Cañar, Loja, El Oro y la amazónica  Zamora Chinchipe.
Heras detalló vía telefónica que invitaron a más de doscientos representantes de la sociedad civil, del Gobierno Nacional y de las empresas mineras.
El obispo dijo que la Iglesia se encuentra en un momento de “reflexión” sobre el tema, pero que existe una “incertidumbre” sobre los grandes proyectos mineros y su posible impacto ambiental y social.
Para Heras, se debe a que en el país hasta ahora no existían proyectos mineros a gran escala ni a cielo abierto y por ello surgen dudas de “¿cómo queda el medio ambiente, qué pasará con los pueblos de alrededor, la verdad de si habrá efectos de la contaminación o habrá el cuidado respectivo?”.
El obispo resaltó como principales “preocupaciones” si esta actividad va a impactar en “el uso de las tierras, de los suelos, la contaminación del agua” y, por ende, los efectos que pueda tener en cuanto a seguridad alimentaria de los habitantes de la zona.

Iglesia preocupada por efectos de la minería

La Iglesia católica de Ecuador se muestra preocupada por las posibles consecuencias sociales y ambientales de la minería, según dijo a EFE, Walter Heras, obispo de la provincia amazónica de Zamora Chinchipe, donde el Gobierno firmó el primer proyecto de minería a gran escala.

En la capital de esta provincia, Zamora, tiene lugar el foro “La Iglesia frente a los megaproyectos mineros”, organizado por la Pastoral Social de la zona sur del país, donde participan representantes eclesiásticos de las provincias serranas de Azuay, Cañar, Loja, la costeña de El Oro y la amazónica de Zamora Chinchipe.

Heras detalló vía telefónica que a este encuentro, en el que se espera que participen unas 200 personas, han invitado a representantes de la sociedad civil, del Gobierno y de las empresas mineras.
   
Preocupaciones

Para Heras,  en el país, hasta ahora no existían proyectos mineros a gran escala ni a cielo abierto y por ello surgen dudas de “¿cómo queda el medio ambiente, qué pasará con los pueblos de alrededor, la verdad habrá efectos de la contaminación o habrá el cuidado respectivo”?.

El obispo resaltó como principales “preocupaciones” si esta actividad va a impactar en “el uso de las tierras, de los suelos, la contaminación del agua” y, por ende, los efectos que pueda tener en cuanto a seguridad alimentaria de los habitantes de la zona. EFE


A gran escala

El pasado marzo, el Gobierno selló la primera concesión de minería a gran escala del país con la empresa china Ecuacorriente para la explotación de un yacimiento de cobre en Zamora Chinchipe.

El Gobierno mantiene que el proyecto se realizará con el menor impacto ambiental posible y que la empresa creará un fondo para reparar el daño a la naturaleza.